¿Qué cubre un seguro de coche a todo riesgo?

No asumas riesgos con tu vehículo y despreocúpate

Contar con un seguro de coche a todo riesgo es la opción más completa para garantizar la protección de tu vehículo ante cualquier imprevisto. Muchos particulares como empresas se deciden por esta modalidad para evitar preocupaciones y minimizar riesgos económicos en caso de accidentes, robos o daños propios. 

Pero, ¿qué coberturas incluye exactamente un seguro a todo riesgo sin franquicia o con franquicia? Analizamos en profundidad lo que puedes esperar de un seguro a todo riesgo y por qué es una inversión en tranquilidad.

Coberturas básicas de un seguro a todo riesgo

Un seguro a todo riesgo se diferencia de otras modalidades porque, además de cubrir daños a terceros, también protege tu propio vehículo. Aunque cada aseguradora puede ofrecer variantes en sus pólizas, hay una serie de coberturas esenciales que suelen incluirse en este tipo de seguros.

Daños propios en un seguro a todo riesgo

Una de las principales razones para elegir un seguro a todo riesgo es la cobertura de daños propios. Esto significa que, en caso de accidente, el seguro asumirá los costes de reparación de tu coche, sin importar de quién haya sido el responsable.

También incluye daños por actos vandálicos, condiciones meteorológicas adversas como granizo o inundaciones, e incluso, dependiendo de la póliza, puede cubrir la sustitución de lunas.

Si el daño es tan grave que se considera siniestro total, la indemnización varía según la antigüedad del vehículo. Algunas aseguradoras compensan con el 100 % del valor a nuevo si el coche tiene menos de dos años desde su matriculación. Pasado este tiempo, la indemnización suele calcularse según el valor venal del vehículo.

Responsabilidad civil obligatoria y voluntaria

Todo seguro de coche en España debe incluir la responsabilidad civil obligatoria, que cubre los daños causados a terceros. Sin embargo, los seguros a todo riesgo suelen ampliar esta cobertura con la responsabilidad civil voluntaria, que aumenta la protección en caso de daños materiales y personales más elevados. También puede incluir la cobertura de remolques y caravanas o de objetos transportados en el vehículo.

Robo e incendio

Otra ventaja de los seguros a todo riesgo es la protección contra robo e incendio. Si tu coche es sustraído o sufre daños debido a un intento de robo, la aseguradora se hará cargo del siniestro. Del mismo modo, si un incendio afecta tu vehículo, la póliza cubrirá las reparaciones o la indemnización correspondiente según el valor del coche en el momento del siniestro.

Coberturas extras de un seguro de coche a todo riesgo

Más allá de las coberturas básicas, los seguros a todo riesgo pueden incluir garantías adicionales que refuerzan la protección del conductor y su vehículo. Estas coberturas pueden ser opcionales o venir integradas según la aseguradora.

Vehículo de sustitución en caso de siniestro

Si tu coche sufre una avería o es robado, algunas pólizas a todo riesgo incluyen un vehículo de sustitución para que no te quedes sin movilidad mientras el problema se resuelve. Esta cobertura es especialmente útil para quienes dependen del coche en su día a día.

Defensa jurídica y gestión de multas

Los seguros a todo riesgo incluyen defensa jurídica y reclamación de daños. Si tienes un litigio relacionado con un accidente de tráfico, la aseguradora cubrirá los gastos legales. Además, algunas pólizas incluyen asesoramiento en la gestión de multas de tráfico y asistencia en trámites administrativos.

Asistencia en carretera desde el kilómetro 0

Una de las coberturas más valoradas por los asegurados es la asistencia en carretera. Esta garantía te asegura ayuda inmediata en caso de avería o accidente, incluyendo remolque del vehículo, reparaciones in situ y transporte para los ocupantes si es necesario. La asistencia puede ser desde el kilómetro 0, lo que significa que recibirás ayuda incluso si tu coche se avería en tu domicilio.

Seguro a todo riesgo con o sin franquicia, ¿cuál elegir?

Cuando contratas un seguro a todo riesgo, puedes elegir entre dos modalidades: con o sin franquicia. La principal diferencia radica en el coste y la responsabilidad del asegurado en caso de siniestro.

Seguro a todo riesgo sin franquicia

Esta opción cubre el 100% de los daños, sin que tengas que abonar ninguna cantidad en caso de accidente. Es la alternativa más completa, aunque también la más costosa. Suele ser la opción recomendada para coches nuevos o de alto valor.

Seguro a todo riesgo con franquicia

Con esta modalidad, el asegurado asume parte del coste de la reparación en caso de siniestro. Por ejemplo, si tienes una franquicia de 300 euros y los daños ascienden a 1.500 euros, pagarás los primeros 300 y la aseguradora se hará cargo del resto. Esta opción reduce el coste del seguro, pero puede suponer un gasto inesperado si sufres un accidente.

¿Cuándo merece la pena contratar un seguro a todo riesgo?

Elegir un seguro a todo riesgo es una decisión personal que depende de varios factores. Si tienes un coche nuevo o de alta gama, esta modalidad te asegurará que cualquier daño quede cubierto sin afectar tu economía. También es recomendable si utilizas tu coche con frecuencia o si estacionas en la vía pública, donde está más expuesto a robos o actos vandálicos.

Por otro lado, si tu coche ya tiene varios años y su valor de mercado ha disminuido, puede que un seguro a terceros ampliado sea suficiente para ti. En cualquier caso, lo importante es evaluar tus necesidades y comparar opciones para elegir la póliza que mejor se adapte a ti.

En Aragonés & Cemborain te acompañamos para que encuentres la póliza que mejor se ajuste a ti. Contacta con nosotros y te ayudaremos a tomar la mejor decisión para tu tranquilidad.

No te olvides:

  • Un seguro de coche a todo riesgo ofrece una protección integral para tu vehículo, protegiendo tanto a terceros como a tu propio vehículo, cubriendo daños propios, robo e incendio.
  • Puedes optar por una modalidad con o sin franquicia según el nivel de cobertura y el coste que estés dispuesto a asumir.
  • Es la mejor opción para coches nuevos o de alto valor, aunque es recomendable evaluar si se adapta a tus necesidades y presupuesto.